Antes de aplicar el producto, asegúrate de que la superficie esté completamente seca. Agita bien el envase y rocía el limpiador en seco a una distancia aproximada de 15 a 20 cm sobre la prenda o calzado, cubriendo de manera uniforme el área a tratar. Espera unos segundos y, con ayuda de un cepillo suave (preferiblemente de cerdas para gamuza), frota con movimientos delicados en una sola dirección para remover la suciedad y activar el efecto revitalizante del producto.
Para obtener mejores resultados, puedes repetir el procedimiento si la mancha persiste, evitando saturar el material. No utilices en cuero liso o sintético. Se recomienda probar el producto en una zona poco visible antes de su uso general. Después de la aplicación, deja reposar el producto al aire libre durante unos minutos para que actúe completamente y el material recupere su textura y color natural.